La semana pasada ya contamos los beneficios
de pasar las vacaciones en la playa pero no a todas os gusta disfrutar de
vuestros días de descanso en la playa. Seguro que muchas preferís viajar al
campo y, por unos días, estar alejadas de los problemas y el ajetreo que
ocasiona la ciudad y en algunos momentos la playa.
Pasar unos días rodeado de la naturaleza es
muy beneficioso para la salud. Algunos estudios han demostrado que el aire puro,
rico en oxígeno, aporta partículas vitalizantes que nuestro cuerpo absorbe a
través de la respiración y de las células de la piel. Así, se contribuye a la
relajación y la desintoxicación del cuerpo.
Cuando estamos en el campo notamos la
diferencia incluso al andar, pues el ambiente frenético de la ciudad nos lleva
a caminar y trasladarnos con prisa. Sin embargo, en el campo vamos paseando con
total tranquilidad mientras disfrutamos del paisaje y respiramos profundamente.
Todo esto hace que nuestra mente cree un espacio lleno de positivismo y nos
permita relajarnos y olvidar todo lo que hemos dejado en casa.
No sólo cuando estamos despierto notamos las
ventajas del campo, incluso cuando dormimos es beneficioso. Por lo general, el
campo es un lugar más fresco por eso es frecuente que se duerma con las
ventanas abiertas para que entre el aire. Esto nos aporta dos ventajas: la
primera es no tener que dormir con el aire acondicionado.
Y la segunda es que en los parajes naturales
es muy habitual el sonido de los pájaros piando y del movimiento de las hojas
de los árboles. Estos sonidos son muy estimulantes cuando dormimos y muy
beneficiosos para que nuestros sueños sean más profundos y positivos.
Vayas donde vayas a pasar las vacaciones
seguro que has escogido bien y sabrás beneficiarte de todos los aspectos
positivos que te depara ese destino.
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